La principal problemática de la seguridad alimentaria y nutricional en el mundo radica en la desigualdad de acceso a alimentos suficientes, seguros y nutritivos. Aunque se produce suficiente comida para alimentar a toda la población mundial, factores como la pobreza, el cambio climático, las ineficiencias en los sistemas de distribución y el desperdicio de alimentos dificultan que millones de personas accedan a una dieta adecuada.
En la actualidad, garantizar la disponibilidad y el acceso de alimentos nutritivos y de calidad es uno de los mayores retos para la industria de la alimentación pues se estima que somos alrededor de 8 mil millones de personas habitando en el planeta.
El reto para el sector de los alimentos global es claro: satisfacer la demanda de alimentos nutritivos y de calidad que garanticen la buena salud de las personas; y a la vez su producción preserve los recursos naturales para permitir la sostenibilidad.
Como parte del sector porcícola en México, en Kekén nos sentimos orgullosos y comprometidos de proporcionar carne de cerdo altamente nutritiva y de calidad a los hogares de familias mexicanas y de muchas partes del mundo.
Nuestra calidad contribuye a la seguridad alimentaria
A fin de garantizar un sistema de gestión de seguridad alimentaria que hace posible la estricta inocuidad en nuestros productos, nos valida la certificación FSSC22000, norma reconocida internacionalmente y que nos posiciona entre las empresas mexicanas más competitivas en el mercado internacional.
Nuestras plantas procesadoras cuentan con la certificación TIF que garantiza que nuestro producto final tenga los más altos estándares de calidad e inocuidad. Para alcanzar esta certificación, nuestros procesos cumplen con las más estrictas normas de sanidad e higiene que incluye la supervisión por parte de veterinarios especializados del gobierno mexicano.
Nuestra sostenibilidad de la mano con la seguridad alimentaria y nutricional
A la par de garantizar productos nutritivos e inocuos a la población, en Kekén día con día nos ocupamos a través de la mejora continua, investigación e inversión en orientar nuestros procesos hacia la sostenibilidad.
La preservación de nuestros recursos naturales es lo más importante, por ello nuestras iniciativas para protegerlo se reflejan en la implementación de innovación, tecnología y buenas prácticas; como por ejemplo, nuestro moderno sistema de plantas de tratamiento de aguas residuales, logrando la gestión responsable de este vital recurso.
Es importante compartirles que destinamos a conservación cerca de 15 mil hectáreas de selva nativa, ¿Qué significa esto? Significa preservar la vida y prosperidad de especies de flora y fauna tanto endémicas como migratorias en su hábitat en un sano equilibrio con nuestras operaciones.
La porcicultura y la seguridad alimentaria y nutricional
La porcicultura tiene una relación directa con una dieta saludable, ya que proporciona una fuente importante de proteínas de alta calidad a través de la carne de cerdo. Este alimento es rico en nutrientes esenciales como vitaminas del grupo B (en especial B1, B6 y B12), minerales como zinc, fósforo y hierro, además de grasas saludables cuando se seleccionan cortes magros como el lomo o el solomillo.
La porcicultura moderna también se enfoca en la producción sostenible y el mejoramiento de la calidad nutricional de la carne, adaptándose a las necesidades de los consumidores que buscan opciones más saludables. Al ser incorporada de manera equilibrada en la dieta, la carne de cerdo puede contribuir al mantenimiento de la masa muscular, el fortalecimiento del sistema inmunológico y el aporte energético, siempre que su consumo se combine con otros alimentos ricos en fibra, vitaminas y minerales.
En Kekén sabemos que la sostenibilidad también va de la mano con la salud y el bienestar de nuestros animales. Cloverleaf Animal Welfare System certificó nuestras plantas procesadoras de Sahé y Umán, así como nuestras granjas en términos de Bienestar Animal.
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Ser una empresa responsable, comprometida y con la visión puesta hacia el futuro es garantizar las condiciones para que las futuras generaciones sigan recibiendo alimentos nutritivos y de calidad, manteniendo así la seguridad alimentaria y nutricional de nuestra población.