Guía nutricional práctica para aprovechar al máximo la carne de cerdo


1 julio 2024

A lo largo de los años, la carne de cerdo ha mejorado significativamente su calidad nutricional, gracias a la reducción en el porcentaje de grasa, convirtiéndola en uno de los alimentos más completos para satisfacer las necesidades nutricionales de hoy en día.

En esta guía nutricional damos a conocer los beneficios que aporta el consumo de carne de cerdo y cómo integrarla en tu alimentación diaria.

Guía nutricional para el consumo de carne de cerdo

Antes de iniciar es importante que conozcas que la carne de cerdo es una excelente fuente de proteínas de alta calidad, esenciales para el crecimiento y mantenimiento de la masa muscular porque se compone de agua, sales minerales, diversas vitaminas y proteínas, con un bajo contenido en hidratos de carbono y lípidos.

Esta composición varía según factores como la alimentación del cerdo y el tipo de corte. También es una fuente rica en proteínas de alta calidad, hierro, zinc y vitaminas del grupo B, como la tiamina (B1), niacina (B3), piridoxina (B6) y cobalamina (B12).

De todos los nutrientes de la carne, las proteínas, con un aporte de 16-25%, ocupan un lugar preferente. Su porcentaje en la carne de cerdo resulta superior al de muchos otros alimentos. El contenido en aminoácidos esenciales de la proteína de la carne le proporciona un elevado valor biológico, lo que significa que estas proteínas son altamente aprovechables por el organismo, contribuyendo de manera eficaz al crecimiento y reparación de tejidos.

Evolución de la carne de cerdo

En las últimas décadas, la carne de cerdo ha experimentado una evolución notable en la calidad nutricional. Las piezas cárnicas más comercializadas, como el jamón, la paleta, el lomo y el solomillo, ahora contienen menos grasa gracias a mejoras en la alimentación y la genética de los cerdos.

Aportaciones de la carne de cerdo

La carne de cerdo es una fuente significativa de proteínas que ayudan a aumentar y conservar la masa muscular, esenciales para el crecimiento y desarrollo normal de los huesos. Además, su contenido en grasas monoinsaturadas y poliinsaturadas contribuye a mantener niveles normales de colesterol sanguíneo.

Nutrientes esenciales

  • Proteínas: Necesarias para el crecimiento y mantenimiento de los músculos.
  • Potasio: Ayuda al funcionamiento normal del sistema nervioso y muscular.
  • Fósforo: Es esencial para el metabolismo energético y la salud ósea.
  • Zinc: Contribuye al metabolismo de carbohidratos, ácidos grasos y la síntesis proteica.
  • Hierro: Importante para la formación de glóbulos rojos y el transporte de oxígeno.
  • Vitaminas B: Incluyendo B1, B3, B6 y B12, cruciales para el metabolismo energético y la función inmunitaria.

Frecuencia de consumo en las diferentes etapas de vida

La carne de cerdo es apta para personas con diferentes necesidades dietéticas, desde niños en crecimiento hasta adultos que buscan mantener una dieta saludable. Es una excelente opción para introducir en la dieta de los niños debido a su alta digestibilidad y contenido nutricional. A medida que los niños crecen, las raciones de carne de cerdo pueden aumentar, contribuyendo al desarrollo muscular y óseo.

Edad adulta

En la edad adulta, se recomienda consumir de 3 a 4 raciones de carne magra de cerdo por semana. Este consumo ayuda a mantener una dieta variada y equilibrada, proporcionando proteínas de alta calidad y nutrientes esenciales como el potasio, fósforo, zinc y hierro.

Integración de la carne de cerdo en una dieta equilibrada

Para maximizar los beneficios nutricionales de la carne de cerdo, es esencial integrarla adecuadamente dentro de una dieta equilibrada. Al combinar la carne de cerdo con vegetales, legumbres, cereales integrales y frutas, se puede asegurar una ingesta óptima de nutrientes esenciales.

Por ejemplo, una comida balanceada podría incluir una porción de lomo de cerdo magro acompañada de una ensalada de verduras frescas, una porción de quinoa y una pieza de fruta.

Esta combinación no solo proporciona proteínas de alta calidad y vitaminas del grupo B de la carne de cerdo, sino también fibra, vitaminas y minerales de los otros alimentos. Además, es recomendable optar por métodos de cocción saludables, como el asado, la parrilla o la cocción al vapor, para mantener el contenido de grasas bajo y preservar los nutrientes

Esta guía nutricional nos permitió conocer más acerca del valor nutritivo de esta proteína cárnica. Para tu tranquilidad, en Kekén nuestra principal objetivo es ofrecer carne de cerdo de la más alta calidad en tu mesa y contribuir a una sana alimentación que la vida actual requiere.

Quizás te pueda interesar: Cultura de calidad, el sello distintivo de Kekén en cada producto.

PUBLICACIONES RELACIONADAS

error: Los contenidos de este sitio cuentan con derechos de propiedad intelectual, por lo que está prohibida su publicación, reproducción, distribución o retransmisión sin autorización previa de la empresa. Agradecemos su interés y lectura.